Benedicto XVI, hasta pronto

 

Ya ha vuelto el Papa al Vaticano. Algunos habrán respirado profundo por su marcha ya que seguramente se habrán sentido incomodados por varias de las reflexiones doctrinales del Papa. Pero tendrán que volver a preocuparse dentro de nueve meses porque Benedicto XVI volverá como motivo de la Jornada Mundial de la Juventud. Veremos que se inventa Zapatero en el mes de agosto para no recibir al Papa, para hacer dejación de funciones y para esconderse. Y es que lo cierto es que a Zapatero no le gustan los espacios abiertos con miles de personas a su alrededor, le aterroriza y es normal que no tenga ganas de oír como la sociedad española le silba y le critica la nefasta gestión que ha hecho durante sus años de legislatura.

Todos estos tendrán que volver a escuchar el mensaje universal de apoyo a la Familia, el mensaje de apoyo a la vida y de rechazo al aborto, el mensaje que volverá a dejar el Santo Padre de que España sea una familia unida. Este último mensaje es más complicado, ya que dentro de España hay algunos que no quieren que entre hermanos se dejen el pan, no quieren que entre hermanos no seamos solidarios, no se pasen el agua o el que es más rico no se acuerde del más pobre. El que España fuese una gran familia sería lo ideal y lo lógico, porque la familia sigue siendo, a pesar de todos estos ingenieros sociales que quieren inventarse alternativas diarias todos los días, el gran sustento de la sociedad, si falla la familia falla la sociedad. Seguramente nuestra sociedad está fallando porque la institución de la familia está en crisis.

Nos quieren envolver con ese ultralaicismo agresivo que se desprende de una minoría de la sociedad española y sobre todo de quienes la dirigen. Como ejemplo podemos hablar del recibimiento que hizo el señor Buenafuente con un video cargado de insultos y necedades sobre la Iglesia. ¡Pero qué valientes son con una religión tolerante como es la cristiana! Me gustaría verles hacer algo así con el presidente de Irán, con Mahoma, con el Islam o con el trato que da la ley Sharia a los homosexuales y las mujeres ¿Dónde está Zerolo y Leire Pajín? Ni se les espera. De verdad, que valientes son estos laicos progretas ignorantes, incultos e intolerantes

Esta gentuza no entiende que cualquier religión moderada merece un mínimo respeto, ¡mínimo! y la Iglesia Católica es respetable. Ese video del señor Andreu Buenafuente nos debe producir tristeza porque me parece de una grosería, de una gratuidad en la ofensa, de una falta de respeto mínimo que son valores democráticos básicos. Este video no sólo ofende a la Iglesia, sino a los millones de cristianos que hay en España y en el mundo. Y diré más, el equiparar a la Iglesia Católica con un carnaval de disfraces como es el desfile del orgullo gay me parece bastante poco serio, además de ser un rebuzno intelectual es profundamente falso. Si en este momento hay una institución que merece nuestro respeto, apoyo y solidaridad es la Iglesia Católica y una de sus organizaciones como es Cáritas, donde ateos, laicos, de izquierdas, de derechas y cristianos trabajan conjuntamente porque es la solidaridad más efectiva que existe en España y diría que en el mundo.

No estoy a favor de sancionar a nadie por expresar lo que piensa, pero si el ultrasectario señor ministro Sebastián entiende que el spot de Intereconomía merecía una sanción de 100.000€, entonces ¿Cuánto vale el spot de Buenafuente? Desde luego, si esta es la única forma que le queda para hacer reír a la gente sólo cabe decir que Buenafuente está acabado como humorista.

En España llevamos viviendo unos años de anticlericalismo y de laicismo muy agresivos. Se está intentando ocultar la presencia de la fe y de la creencia en Dios en nuestra sociedad. ¿Dónde queda esa libertad religiosa si estamos comprobando que se está persiguiendo al cristianismo? De seguir así ¿Cómo podremos explicarles a los niños porqué Europa está plagada de campanarios, de cruces tanto en los monumentos como en las banderas de los distintos países? ¿Cómo explicar a los jóvenes de donde proviene nuestra civilización? ¿Cómo explicar a los jóvenes de donde provienen nuestras tradiciones? En definitiva, como explicarnos lo que hoy somos sin el cristianismo.

El cristianismo no es sólo una fe, sino que también es una cultura y una civilización. En este proceso de descristinialización que están intentando también se está produciendo un ataque a nuestra civilización, a nuestra cultura y a nuestros valores. Nuestras raíces, las raíces de Europa, son cristianas y están bombardeando nuestra propia historia, nuestro propio origen. Además, nuestra civilización, con sus imperfecciones, es la más prospera y la más justa socialmente. Si yo pudiera volver a nacer y elegir donde nacer elegiría un país de historia, de ámbito, de origen cristiano, porque son los países más prosperos y más justos socialmente tanto para los hombres como para las mujeres. Solamente algunos insensatos son capaces de apedrear nuestro propio origen y nuestra civilización. Defender el arraigo histórico y sociológico del catolicismo en España no es cuestión de debate ideológico, sino la pura constatación de una evidencia.

Si Europa ha sido la cuna de las libertades es porque echó raíces en el humanismo cristiano y en la concepción de la persona como templo de Dios, siguiendo la enseñanza evangélica según la cual no hay hombre ni mujer, ni amo ni esclavo, ni judío ni griego, sino todos iguales en derechos y obligaciones. Sobre esta doctrina se ha construido la civilización occidental en libertad y progreso. De ahí el especial interés de Benedicto XVI en España y su futuro. El Papa ha denunciado sin rodeos una ofensiva contra la Iglesia, cuyo único precedente en nuestra historia se sitúa en la época convulsa de la II República donde se asesinaba a curas y clérigos, donde se disparaba contra crístos, vírgenes y santos, donde se quemaban iglesias. El Gobierno ignora y vulnera la Constitución en su artículo 16 donde exige a los poderes públicos una cooperación con la Iglesia católica y las demás confesiones, por lo que vivimos en un estado aconfesional y NO laico.

Este laicismo radical quiere hacer ver que el que es laico es de izquierdas y el que es cristiano es de derechas, pues es totalmente falso, el cristianismo no contempla ideologías, el cristianismo es universal, tanto de razas como de ideologías. Hay gente que está dedicando bastante tiempo a esta farsa. Como ejemplo tenemos a nuestro presidente Zapatero, que ha preferido, después de cinco años, visitar Afganistán a recibir al Papa, porque no hay que olvidar que aparte de que Benedicto XVI sea el líder de la Iglesia Católica, del cristianismo, es también un jefe de Estado y por la condición política de Zapatero le obliga a recibirlo. Aunque también es cierto que cuando Zapatero no está por España sólo nos pueden pasar cosas buenas y de hecho llegó el Santo Padre.

En España dicen ser Cristianos y Católicos 30 millones de españoles, el 75% de la sociedad española, que Zapatero se haya largado para no recibirlo es una falta de irresponsabilidad enorme y una falta de respeto a toda esa parte mayoritaria de la sociedad que él también representa. Eso sí, luego se marcha a rezar con Obama o en su viaje a Afganistán apoya una corona sobre una cruz cristiana por los soldados muertos ¿Se puede ser más falso? Evidentemente ¿Con qué cara se presenta frente a Benedicto XVI después de legislar que el aborto es un derecho? El crimen del ser más inocente que vive en el vientre de su madre o ¿Cómo mira de frente al Papa después de sacar de los colegios, donde ha estado durante siglos, el crucifijo y la religión? Dos aspectos fundamentales de nuestra civilización ¿Cómo le mira a los ojos cuando tergiversa el concepto de matrimonio? En todo caso será unión homosexual y no matrimonio homosexual. La radicalidad de Zapatero en estos casos asombra.

Es muestra de la zafiedad intelectual del señor Zapatero y de todos esos que predican el laicismo radical, no hablo del laicismo moderado, sino de este laicismo rancio y radical que no tiene sentido. No han tardado mucho es tergiversar el mensaje del Papa. Benedicto XVI dijo en Santiago que la confrontación entre laicismo y fe se tienen que acabar. La confrontación entre fe y razón es absurda y no tiene ningún sentido ya que la fe se escapa a la razón. Pues estos progres ya están diciendo que “el Papa ataca al laicismo”, visto lo visto, diga lo que diga el Papa le van a seguir atacando porque estos progretas de tres al cuarto también se escapan a la razón. Ignoran además que el Papa, a parte de su condición espiritual y de ser el representante de Cristo, es una de las cabezas más brillantes, intelectualmente hablando, del mundo, es uno de los grandes intelectuales que hoy tiene el mundo. Juan Pablo II ya lo demostró y ahora lo hace Benedicto XVI.

Benedicto XVI habla de la falsa confrontación nacida en la masonería en la Revolución Francesa de fe y razón, porque la razón no está en contraposición con la fe. La razón nos define para ser más libres. La razón, la inteligencia, la investigación, la ciencia, las matemáticas, la geometría, mientras que la fe se escapa a todo eso, se escapa a la razón. Es tan sencillo como que se tiene fe o no se tiene. Son más de 1.500 millones de creyentes cristianos en el mundo que tienen fe, pero que también son investigadores, matemáticos, científicos y que trabajan por la razón y por la verdad. Pero la fe también es verdad. Por lo tanto, no tiene sentido esa guerra que algunos se traen entre fe y razón.

Y los nacionalistas politizando la visita del Papa otra vez con el idioma a cuestas. Esto es de un aldeanismo atufante. Como si el Papa no tuviera una conciencia histórica de lo que son las regiones europeas y de donde vienen. El Papa sabe perfectamente lo que es Cataluña y cuál es su encastración con España. ¡Pero si el Papa sabe mejor que Artur Mas que es Cataluña y cuál es la historia de Cataluña! otra cosa es que no sepa quién es Artur Mas y ni le preocupe saberlo.

El Papa nos ha traído el mensaje de Amor, familia, vida, paz y unidad.

El mensaje del Papa a favor de la vida es clarísimo cuando dice “Dejadme que proclame la gloria del hombre, que advierta de las amenazas a su dignidad por el expolio de sus valores y riquezas originarios, por la marginación o la muerte infligidas a los más débiles y pobres”. En Europa se está matando a los más débiles, a los no nacidos y nos estamos haciendo los distraídos, como si un bebé menos no fuese importante, como si el asesinato de un niño no tuviera importancia. La sociedad europea y en nuestro caso la española está enferma de relativismo.

El Papa lanza el mensaje a favor de la vida como “sagrada e inviolable desde el momento de su concepción” y pide que “la natalidad sea dignificada, valorada y apoyada jurídica, social y legislativamente”.  Y fue tajante cuando aseveró que “La Iglesia se opone a todas las formas de negación de la vida humana, y apoya cuanto promueva el orden natural en el ámbito de la institución familiar”.

Benedicto XVI  dice que “el amor generoso e indisoluble de un hombre y una mujer es el marco eficaz y el fundamento de la vida humana en su estación, alumbramiento, crecimiento y su término natural”, tras lo cual hizo una defensa del matrimonio católico. Así, el Santo Padre pidió el apoyo “decidido” del Estado al hombre y la mujer que contraen matrimonio y forman una familia. Contrastó que “las condiciones de vida han cambiado mucho” desde los orígenes del cristianismo los cristianos no deben contentarse con los progresos técnicos, sociales y culturales, sino que “deben estar siempre los progresos morales, como la atención, protección y ayuda a la familia”.

Nos ha dicho en Santiago y Barcelona que defendamos la vida de los indefensos, la suerte de los desfavorecidos, y la libertad en paz de todos los hombres. Un mensaje del Santo Padre que deja un reguero de paz, un reguero de amor, una doctrina católica que ha dejado tras su marcha y de la que más nos valdría tomar buena nota. ¿Por eso lo insultan?

Me parece oportuno aclarar el tema de la financiación de la Iglesia, ya que los laicos juzgan sin motivo la relación económica entre el Estado y la Iglesia. Cuando uno lee la letra pequeña se puede dar cuenta de que la Iglesia le ahorra mucho dinero al Estado. En cuando a la inversión en educación podemos decir que el dinero que recibe la Iglesia va destinado a subvencionar los colegios concertados para la educación de unos alumnos, cuyas familias han elegido libremente esos colegios, y que pagan “religiosamente” sus impuestos. Y por lo tanto, al ser un colegio concertado, al Estado le cuesta menos un puesto escolar en un colegio concertado que en uno público. De la misma forma podría hablar sobre las universidades vinculadas a las distintas órdenes religiosas.

Sobre la actividad hospitalaria la Administración también paga la actividad hospitalaria que realiza la Iglesia a través de los hospitales concertados, ambulatorios, centros de ancianos y discapacitados, donde también se ahorra dinero. La actividad social de la Iglesia también recibe subvenciones estatales, al igual que muchas otras ONG’s y asociaciones que no pertenecen a la Iglesia, a través de la organización Cáritas y de diversas ONG como Manos Unidas, aunque también hay que decir que estas organizaciones también se financian por anónimos con sus donaciones individuales.

Y del mismo modo, se subvenciona el sostenimiento y conservación del patrimonio artístico y cultural que tiene la Iglesia en museos, catedrales y monasterios, que también pertenecen al patrimonio artístico y cultural de España, aunque sean de la Iglesia pero es nuestra historia y nuestro patrimonio. No puedo olvidar la financiación por IRPF, como motivo de que quien lo desee pueda aportar a la Iglesia parte de su aportación al Estado por impuestos. Entonces, ¿Le sería rentable al Estado mantener todos estos colegios, universidades y patrimonio artístico si no pertenecieran a la Iglesia? Evidentemente le sería muchísimo más caro.

José María Carrascal explica muy bien en su artículo “Ciencia, religión, Dios” que si fuéramos capaces de explicar a Dios, seríamos prácticamente sus iguales, lo que a todas luces no somos. A Dios sólo puede vérsele con los ojos de la fe y si es difícil demostrar que Dios existe, tanto o más difícil es demostrar que no existe.

Me despido con el Editorial de Eduardo García Serrado del telediario de Intereconomía que dice así “Hasta pronto Santidad y gracias por venir a Santiago cuyo eje vertebrador fue el camino de la cristiandad en toda Europa. Guíanos Santo Padre por esa ruta que alumbra con la luz del Evangelio al hombre deshabitado que tirita de miedo e incertidumbre en el relativismo. Gracias Santo Padre por pisar con las sandalias del pescador el camino del que hoy se ha expulsado el crucifijo de las escuelas y al padre nuestro de la educación de nuestros niños. Gracias Santo Padre por venir desde la colina vaticana en la que Nerón crucificaba a los cristianos al anfiteatro español donde los bárbaros progresistas llenan de sangre inocente la arena del camino que habéis pisado haciendo del aborto un derecho.  Gracias por venir también a Barcelona donde habéis consagrado esa bellísima obra de piedra y orfebrería que es la Sagrada Familia de Gaudí. Sabéis muy bien Santo Padre donde habéis estado sin necesidad de que Artur Mas os lo cuente, enseñarle usted a él que España sin Cataluña no es España y que Cataluña sin España no es Cataluña. Hasta pronto Santo Padre”.